Nosferatu, la cinta olvidada

Hoy hablaremos de un clásico del cine mudo de terror. Su título: "Nosferatu, eine Symphonie des Grauens" (Nosferatu, Sinfonía del Horror) o como se conocía en España: "Nosferatu el Vampiro". Dirigida por F.W. Murnay en 1922 y protagonizada por Max Shreck en el papel del sobrecogedor Nosferatu.

Esta adaptación sin licencias de la novela de Bram Stoker, El Conde Drácula, dio lugar a esta inolvidable cinta muda donde el conde vampiro se apellida Orlok. Se ordenó la destrucción de todas las copias debido a la violación de los derechos de autor pero sobrevivieron algunas copias en manos de particulares, aunque siempre con una calidad pobre. Se esperó a la muerte de la viuda de Stoker para hacerlas públicas.

EL título que se le da a la cinta, "Nosferatu" tiene una etimología confusa. Fue usado por primera vez en la novela de Bram Stoker como vocablo rumano para designar al vampiro, lo cual es falso porque en Rumanía esa palabra carece de significado. Hay otra teoría sobre el origen de esta palabra la cual nos lleva al vocablo griego "nosóforos" o agentes transmisores de enfermedades. Esta dereivación tiene algo más sentido pues en Europa Central se atribuía a los vampiros la transmisión de enfermedades por el contacto con la sangre. Existe una tercera teoría que nos sugiere que el término es una mala transcripción del rumano. Por ejemplo, se baraja esta combinación: necurat (“sucio”, asociado generalmente con lo oculto) y nesuferit (“insufrible”).

Seguidamente os dejo un extracto de la cinta, uno de los muchos que circulan por internet. Este cine de terror en blanco y negro es muy distinto al que estamos acostumbrados hoy en día, donde el gore sustituye al verdadero terror. Recomendable ver este tipo de cine a oscuras en casa, ya veréis...